El ánimo de Natividad Llanquileo, vocera de los mapuches en huelga de hambre de Concepción, lo decía todo. Cabizbaja y hablando insistentemente por celular llegó a las 11:53 horas de ayer a un nuevo encuentro con el subsecretario de la Presidencia, Claudio Alvarado, y monseñor Ricardo Ezzati.

Poco antes, en La Araucanía, uno de los voceros de los 11 huelguistas de Angol, Jorge Huenchullán, ya había dado luces de la división que está surgiendo entre representantes de los huelguistas.

"Concepción no es el dueño de la huelga de hambre. Son sólo 5. Aquí somos 35 hermanos. Temas personales o familiares que tengan con Ezzati o el Gobierno no es la solución a la huelga. Nosotros esperamos una mesa donde se establezcan las partes y discutamos los temas para la libertad de nuestros hermanos", dijo Huenchullán en la mañana de ayer.

Fue en ese contexto que algunas de las partes del conflicto se reunieron sólo por cerca de 30 minutos. La explicación que dieron los presentes por el abrupto fin de la cita fue que la "distancia física" habría impedido una comunicación fluida para que todos los voceros analizaran el documento de preacuerdo, ya redactado.

Más allá de esa justificación, en el entorno de los comuneros mapuches ya estaban conscientes de las diferencias que existen entre ellos. De hecho, en la noche del viernes estaba prácticamente zanjado que los mapuches presos en la Región del Biobío terminarían la huelga tras conocer la propuesta del Gobierno, que incluye desistirse de las querellas por delitos terroristas y perseguirlos como ilícitos comunes. Pero ayer las diferencias comenzaron a ser más evidentes entre los mapuches, y los representantes de Angol y de Temuco se mantuvieron en una postura más dura.

Pese a las divergencias, monseñor Ezzati dijo: "Esperamos llegar a una feliz conclusión mañana (hoy) en la noche" y acotó que para la cita espera "la participación de todos".

Sin embargo, Huenchullán anunció que se restará del encuentro de hoy. "No voy a ir mientras no nos sentemos los voceros de Temuco, Concepción y Angol y lleguemos a un acuerdo nosotros; recién ahí empieza la mesa de diálogo de verdad".

Otro de los voceros de Angol, Rodrigo Curipán, recalcó que no cree que se alcance hoy un acuerdo, "porque hay contradicciones: el Gobierno ofrece algo, pero el Ministerio Público insiste en seguir aplicando la Ley Antiterrorista", expresó.

Similar postura defendió Eric Millán, vocero de los huelguistas de Temuco. Si bien confirmó su asistencia para hoy, señaló: "El Gobierno y los demás poderes que pertenecen al Estado tienen que decir públicamente que no aplicarán la Ley Antiterrorista".

Fuentes de Palacio comentaron que tal petición no corresponde que se la hagan a ellos. No sólo por la independencia de los poderes del Estado, sino por la posición planteada por el Ministerio Público: que seguirá invocando la mentada ley hasta que ésta sea modificada.

Pero saben, también, que los abogados de los comuneros -que han estado presentes en las conversaciones- tienen claro "que cualquier señal que dé el Gobierno no pasará desapercibida por nadie", comentaron desde el Ejecutivo.

El quiebre de los comuneros complica, también, al Ejecutivo. Una alta fuente de La Moneda comentó que los pasos de la negociación deben hacerse con todos los sectores. "Así se evita un riesgo: que tras firmar un acuerdo, alguna de las partes lo desconozca y diga no sentirse representada en el diálogo".

Presidente lamenta "actitud intransigente"

Desde San Francisco -la última escala de su gira por Estados Unidos-, el Presidente Sebastián Piñera abordó el diálogo que quedó entrampado el viernes en la noche.

"Desgraciadamente todos los pasos y gestos de parte del Gobierno no han tenido una respuesta fecunda de parte de los comuneros en huelga", dijo el Mandatario tras enumerar las gestiones que ha realizado el Ejecutivo como las reformas que impulsa en el Congreso, la mesa de diálogo amplia y las tratativas con los huelguistas.

"Ha sido una actitud muy intransigente y el Gobierno también tiene que velar por respetar el Estado de Derecho, la igualdad ante la ley, proteger a las víctimas del terrorismo y resguardar el orden público", agregó.

Diputados critican la recalificación de querellas por Ley Antiterrorista

Valoran los esfuerzos que ha desplegado el Ejecutivo para lograr el fin de la huelga de hambre, pero condenan que se termine "cediendo a presiones".

Esa es la mirada que un grupo de diputados sostiene tras el anuncio del Gobierno de recalificar las querellas contra los comuneros mapuches y no invocar la Ley Antiterrorista.

Según el parlamentario de RN por La Araucanía, José Manuel Edwards, esta medida "puede ser un precedente muy malo". Agrega: "No veo con buenos ojos que se ceda a presiones, esto puede generar más violencia a futuro".

En esta misma línea se encuentra el diputado UDI Gustavo Hasbún, quien no dio su voto en el Congreso a las reformas que el Gobierno está impulsando sobre la materia.

"¿No es, acaso, terrorismo atacar a un fiscal? Se está dando una muy mala señal, porque quedará cuestionado el Estado de Derecho", dice el parlamentario.

Desde el mismo partido, el diputado y miembro de la comisión de Constitución de la Cámara, Arturo Squella, señala que "se debe respetar la autonomía del poder judicial. Ya hay juicios en curso y una ley vigente".