Diversos sectores ligados al mundo indígena manifestaron su total rechazo a las altas penas de cárcel a las que fueron condenados cuatro comuneros - entre ellos Héctor Llaitul, líder de la CAM - por el ataque a un fiscal en Tirúa.
"Es una sentencia de orden político y, que tiene por objeto frenar las movilizaciones de las comunidades en su lucha por la restitución de las tierras usurpadas y el derecho a la autodeterminación conculcado por el Estado", afirmó Aucán Huilcamán, werkén del Consejo de Todas Las Tierras.El dirigente indígena agregó que la condena deja en evidencia la discriminación racial que existe en contra del pueblo mapuche. Aucán Huilcamán recordó - a modo de comparación - las bajas penas que recibieron dos carabineros por la muerte de dos comuneros.
PREOCUPACIÓN
El Observatorio Ciudadano manifestó su preocupación por la aplicación de penas desproporcionadas y excesivas, considerando que ninguno de los delitos por los que se les condenó significó la pérdida de la vida de otro ser humano.
"Las penas contrastan con la impunidad en que han quedado delitos similares y más graves, como el homicidio cometido en contra de personas mapuches".