Autoridades siguen alerta
y vigilancia se mantiene |
Caída de líderes de
la CAM¨
no significa que esté inactiva |
- Figuras emblemáticas de la organización
mapuche cautivaron y entrenaron a jóvenes para seguir
su lucha, advierten fuentes policiales.
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Desde enero 60 efectivos de Fuerzas Especiales
custodian el Lleu Lleu, donde ha habido ataques incendiarios
como el que se aprecia en la fotografía. Vigilancia seguirá, aseguró Felipe
Harboe.
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Por Fabián Alvarez S.
Si bien las diversas autoridades que tienen que ver con el conflicto
indígena respiraron aliviadas y se frotaron las manos tras conocer
sobre la detención de José Huenchunao, en el discurso
público actuaron con mesura. Esto, porque si bien se trata del
golpe más duro a la Coordinadora Arauco- Malleco (CAM), que
ahora tiene tras las rejas a todos sus líderes emblemáticos
(ver página 3), lo cierto es que difícilmente se puede
asegurar que con esta última captura se haya acabado con todas
las células de esta agrupación mapuche radicalizada.
“Se desarticuló la dirigencia histórica, pero ésta
es una agrupación que se maneja en la clandestinidad, por eso
no tiene una dirigencia establecida, para que uno pueda decir con certeza:
la desarticulamos. Con esto dimos un golpe, pero no descartamos que
haya más líderes en la clandestinidad que estén
operando”, afirmó la fiscal regional, Ximena Hassi.
Con ella coincidió el jefe de la Octava Zona de Carabineros,
general Jaime Vasconcellos Avendaño: “Hay que entender
que es el número 1, el más importante, pero no podemos
hablar de desarticulación”, precisó.
En el gobierno la detención fue calificada sólo como “auspiciosa” y
tanto el subsecretario del Interior, Felipe Harboe; como la intendenta
María Soledad Tohá declinaron hablar del fin de la
CAM. “Es un golpe importante, pero más que a la institucionalidad,
es un golpe a los hechos violentistas”, precisó el subsecretario
a EL SUR.
La intendenta afirmó que confía en que estas detenciones
ayuden en la línea investigativa que el fiscal Mario Elgueta
Salinas lleva adelante en la provincia de Arauco por hechos violentistas
ocurridos durante la vigencia de la Reforma Procesal Penal (ver recuadro).
Durante los años en que los dirigentes históricos de
esta entidad mapuche vivieron en la clandestinidad, fueron tejiendo
redes y preparando “savia nueva”, explicaron fuentes policiales.
Este recambio generacional mantiene viva a la CAM, al menos, en su
espíritu, y si no han actuado es porque este verano la masiva
presencia de efectivos policiales “los han mantenido a raya”,
aseguraron.
Según las fuentes, jóvenes de algunas comunidades del
Lleu Lleu, como la Pascual Coña, donde fue detenido Huenchunao,
la Caupolicán o la Nicolás Calbullanca, recogieron ese
espíritu rebelde de la CAM y no están dispuestos a negociar “por
las buenas” las tierras que reclaman como ancestrales.
Gobierno satisfecho
El subsecretario del Interior, Felipe Harboe, afirmó que la
detención de Huenchunao “revela claramente que la justicia
tarda, pero llega.No hay impunidad para cometer delitos en este país”.
Lo propio manifestó la intendenta Soledad Tohá, quien
dijo que la detención de los líderes de la CAM traerá tranquilidad
a Arauco. Afirmó que “la voluntad del gobierno es rechazar
cualquier acto que atente contra la seguridad de las personas, cualquier
acto de carácter terrorista”.
El subsecretario precisó que “se mantendrán las
medidas para asegurar el orden en Arauco”, en alusión
a los 60 efectivos de Fuerzas Especiales que desde enero están
desplegados en la zona del Lleu Lleu, lo que hizo que “éste
haya sido el verano menos violento en los últimos seis años”,
expresó.
Olor a CAM Todos esperan que las detenciones de los líderes
de la CAM sirvan para esclarecer algunos de los hechos violentistas
que se han registrado en la provincia de Arauco desde que opera la
Reforma Procesal Penal. Una docena de hechos se investigan como delitos
comunes, aunque desde febrero de 2006, agrupados en una línea
troncal. Lo anterior, porque en ellos se sospecha de la autoría
de la CAM.
En la región, el Ministerio Público indaga un sólo
hecho como incendio terrorista. Se trata del caso de Ranquilhue, ocurrido
en Tirúa el 10 de noviembre de 2005. Ese día diez individuos
armados, encapuchados y con ropas de camuflaje aterrorizaron a dos
familias empleadas de Forestal Mininco.
Incendiaron tres vehículos y quemaron casas.
Hitos de la Coordinadora
- En diciembre de 1997 comenzaron las primeras ocupaciones de predios
forestales y enfrentamientos con Carabineros.
- Exactamente un año más tarde un masivo encuentro de
comunidades radicalizadas, efectuado en la provincia de Arauco, dio
paso al nacimiento de la Coordinadora Arauco- Malleco. Los líderes:
Víctor Ancalaf y José Huenchunao.
- A fines de la década del ´90 casi a diario había
atentados en la provincia de Malleco y el sur de la provincia de Arauco.
- Ancalaf, Huenchunao y varios otros miembros de la CAM desfilaron
por las cárceles de ambas regiones.
- A comienzos de 2001 vino el quiebre. Ancalaf cedió y aceptó el
diálogo con el gobierno. Dejó la CAM.
- En los últimos años la CAM ha actuado desde la clandestinidad.
Su página web (alojada en el sitio weftun.cjb.net) está inactiva
desde noviembre de 2005.
Dos visiones, un problema
Para el empresario Osvaldo Carvajal, quien sufrió 52 atentados
en su Reserva Hacienda Lleu Lleu, “sería un error pensar
que con la detención de Huenchunao se acaben las acciones terroristas,
porque los autores intelectuales están libres y mantienen relaciones
con órganos del Estado, ONGs y agrupaciones terroristas del
extranjero”. Para él, José Huenchunao, Héctor
Llaitul y José Llanquileo sólo son el “comando
paramilitar terrorista. Los cerebros son otros”, dijo sin precisar
sus nombres.
En el mundo mapuche, se afirmó que con la detención del
número 1 de la CAM “no se terminarán las reivindicaciones,
porque es un proceso que comenzó hace muchos años. Es
un golpe que recibe el movimiento mapuche, pero no termina con una
agenda -no violenta, precisó- a las que se han ido sumando varias
comunidades”, afirmó Luis Llanquilef Rerequeo, dirigente
de la Coordinación de Territorios Lafquenches. |