El OPSur entrevistó a Gabriel Cherqui, werken de la comunidad mapuche Kaxipayiñ, cuyos territorios se encuentran comprendidos por el área Loma de la Lata (LLL), el principal yacimiento gasífero de Argentina y uno de los más importantes de Sudamérica, operado por YPF SA.
-¿Qué es lo que ellos proponen hacer?La bio remediación es un sistema donde llevan la tierra contaminada a un gran repositorio, y empiezan a trabajar con máquinas venteándolas. Entonces todo el hidrocarburo se termina “volando” o escurriendo, en caso de haber grandes lluvias. Por eso no es recomendable una biodegradación en lugares donde hay mucho viento o mucha lluvia. Hay sistemas superiores a estos en los que sabemos que se le da una disposición final al hidrocarburo, se lo termina retirando. Obviamente, son mucho más caras. Acá se pretende que YPF o la provincia le dé disposición al hidrocarburo que contaminó la tierra, no que se lo lleve el aire o el agua, porque no es serio, no es una cosa responsable.
-¿Y qué se haría con el agua contaminada?
Para ellos el agua es un negocio hoy, dicen que pondrían fuentes recuperadoras de hidrocarburos, pero como negocio, no para sanear el agua. Sabemos claramente que dentro de las comunidades ya hay 30 hectáreas que han sido detectadas con hidrocarburos, donde vos sacás agua, la echás a la leña y arden. Entonces, ¿qué hicieron? Primero dijeron: “Vamos a hacer este programa, donde se va a sanear la napa de agua”. Nunca se saneó la napa, y llevan 5 o 6 años recuperando hidrocarburos, pero el agua no les interesa, porque la reinyectan en el mismo lugar. O sea que no hay nada serio, el agua circula, el hidrocarburo lo venden y el agua la devuelven al mismo lugar, y así sucesivamente. Y eso no es una cuestión seria. Nosotros estuvimos en Bolivia mirando algunos sistemas, que lo proponen en el estudio mismo que se hizo en la comunidad, que se llama “desorción térmica”.
Obviamente la provincia avala y permite a las empresas que quiere y nunca quiso aceptar la desorción térmica (2). ¿Por qué? Porque justamente las empresas de los funcionarios no tienen ese sistema, entonces traerlo de afuera les significaría más costo, más trabajo, y le borraría su negocio personal. Estuvimos en comunidades en Bolivia donde realmente se hace desorción térmica, YPF lo hace, donde recupera la tierra por una lado y el hidrocarburo lo deposita por el otro. Obviamente, eso es más caro. Una desorción térmica remedia entre 80 y 90 metros cúbicos diarios, y la biodegradación llevaría años para remediar esto, o sea que también es un negocio a largo plazo de la empresa que lo esté haciendo.
-Cada vez que la comunidad sale en protesta, los comentarios que aparecen en los medios son que están buscando alguna ventaja material, y no la remediación.
La realidad habla otra cosa. Si lo quieren ver desde el punto de vista del negocio, la comunidad podría tener el mejor negocio si lo quisiera en este momento. Ser parte de este negocio, porque hasta constitucionalmente lo habilitaría. Hemos tenido ofertas millonarias para que nos fuéramos de acá, para que nos callemos la boca, hemos tenido ofertas de Repsol, sumas millonarias, a lo cual nuestra comunidad Kaxipayiñ ha decido que no se trata de una cuestión de plata. Yo podría tener millones de dólares, pero si no tengo salud no me va a ser útil, y no es cultura de nuestra comunidad.
Por otro lado, creo que el saneamiento que exige la comunidad a YPF y a la provincia es la mayor riqueza que puede tener la comunidad, en base y en función del bien de todos, no [sólo] de la comunidad mapuche. Lo que estamos pidiendo es un resarcimiento a nuestra vida, y eso no se trata de una cuestión económica, sino de salud, de vida, de progreso, de desarrollo, de poder saber que nuestros nietos van a poder tomar agua sana, porque sabemos que los millones de dólares no se los van a poder comer ni tomar. Entendemos a la gente que habla y hace esos comentarios porque lo hemos visto, y también sabemos que hay gente del Estado que se encarga de fomentar esa situación. Pero la realidad habla de que acá no se trata de una cuestión de plata sino de que vengan y hagan las cosas bien.
Nosotros podríamos llenar nuestro bolsillo hoy. Sabemos que el funcionario está comprometido, sabemos que la empresa está comprometida, tenemos la posibilidad de sentarnos con ellos y hacer un negocio. Pero nosotros no lo queremos, aunque sería fácil porque en la cultura de este país, o se compra o se extorsiona, y en este momento lo que la comunidad está pidiendo no son ni pagos económicos, ni extorsionando a una empresa para que haga las cosas bien. La realidad dice que no han hecho las cosas bien, la sangre de las personas, el territorio, dicen que no han hecho las cosas bien. ¿Qué queremos con eso? Que se remedie, que se fomente realmente la vida de la gente, y si existiera algo en algún momento que no se pudiera remediar, y si se tuviera que indemnizar en algún momento muy adelante, se tendría que indemnizar a la gente realmente perjudicada, porque eso es así acá y en el mundo. Pero previo a eso tiene que haber remediación, tiene que haber intento de remediación.
Cada vez que la comunidad Kaxipayiñ sale, o el Pueblo Mapuche donde estamos alineados nosotros, cada vez que uno enfrenta una lucha de estas, es por el bien común de todos, donde realmente podamos disfrutar de lo que tenemos, de la cultura, de un hijo, de un árbol, que es realmente lo que nos va a generar tranquilidad. Y no creer en el país o en el mundo que todo se llama plata, acá hay cosas más importantes que la plata, que son la cultura, la vida, un desarrollo, obviamente, con plata después, seguramente, porque así lo han marcado, nos han generado esa necesidad, ese mal necesario. Pero sabemos que la persona, para poder vivir tranquila, necesita dos cosas fundamentales: agua y aire. Y eso hay que cuidarlo.
Notas:
1- La entrevista fue realizada en julio.
2-“Es un tratamiento ex-situ que consiste en calentar el suelo a temperaturas intermedias (250-600 ºC) para evaporar los compuestos orgánicos volátiles o los metales volátiles como el mercurio (Hg).
Los gases contaminados que se generan se separan del aire limpio utilizando un equipo de recolección de gases. Los gases se convierten nuevamente en líquidos y/o materiales sólidos. Esos líquidos o sólidos contaminados son eliminan de manera segura. El polvo y las sustancias químicas dañinas se separan de los gases y se eliminan con seguridad y el suelo limpio se regresa su lugar de origen, siendo previamente rociado de agua para controlar el polvo.” Fuente: www.miliarium.com/Prontuario/TratamientoSuelos/DesorcionTermica.asp
Observatorio Petrolero Sur