El censo 2012(2), por primera vez incorporó una pregunta sobre las lenguas habladas en los pueblos indígenas. Se preguntó a los encuestados autoidentificados como indígenas en qué idiomas pueden tener una conversación dando varias opciones como respuestas, entre ellas la lengua aymara, quechua, rapa nui y mapudugun, y las lenguas estándar castellano e inglés. Los resultados entregados confirman el proceso de pérdida de los idiomas en los pueblos originarios presentados anteriormente por la Encuesta CASEN, 2009, 2006, y también por el Perfil Sociolingüístico de CONADI, 2008.

En el caso del mapudungun los hablantes alcanzan a 8,2%, siendo la lengua indígena porcentualmente más usada por su comunidad la lengua rapa nui. Los datos aunque preocupantes, permiten varias lecturas y sobre todo, ayudan a problematizar una realidad no registrada en anteriores censo, sobre el estado de la diversidad lingüística en Chile. También surgen varias preguntas, entre ellas cómo hacer que el más de un millón y medio de personas autoidentificados como mapuche aumente el número de hablantes bilingües a la par con el aumento de la valoración de la identidad indígena; sobre todo, si se asume que la lengua, cultura e historia forman parte de la existencia de los pueblos y son inseparables de la identidad colectiva e individual de los sujetos.

En lo que sigue se analizaran los datos obtenidos en el primer censo que incluye las lenguas indígenas de Chile; se comentará la pregunta, su metodología de aplicación y los resultados sin desconocer que pueden existir otras conclusiones al respecto. Este análisis se hizo una vez dado a conocer los resultados el año 2013, pero no se había publicado debido a los cuestionamientos de confiabilidad del censo y que aún persiste; sin embargo, creo necesaria su difusión para potenciar el debate del estado de las lenguas y la urgente necesidad de potenciar las políticas de recuperación lingüística.

1. La pregunta.
Entre las razones expresadas por el INE (Instituto Nacional de Estadística) para incorporar las lenguas indígenas en el último censo se encuentra la necesidad de cuantificar y dar a conocer la forma de vida de los pueblos; con esta meta se buscó dar cumplimiento a lo que se establece en el Convenio 169 en materia de derechos indígenas, específicamente al Artículos 6, sobre consulta a los pueblos indígenas y a los artículos 27, 28 referidos a la Educación Intercultural Bilingüe. Para definir las preguntas, el INE consultó a las comunidades el año 2011; oportunidad en que los pueblos criticaron duramente la propuesta inicial dado a que la pregunta referida a los pueblos indígenas no consideraba la recomendación el Convenio 169 en materia de autoadscripción. La propuesta consultaba por la pertenencia a un pueblo indígena y establecía categorías de respuestas que no daban cuenta de la realidad. La pregunta referida a las lenguas indígenas también fue cuestionada, principalmente la referida a la lengua mapuche porque fragmentaba las posibles respuestas en variantes dialectales o regionales en vez de relevar el uso de la lengua mapudungun como categoría supradialectal.
Afortunadamente, el INE reaccionó positivamente a las críticas e incorporó dos preguntas que combinaron dos mecanismos: autoadscripción y pertenencia, y en el tema de lenguas incorporó parcialmente las observaciones realizadas, preguntando por la lengua de uso, no así por el grado de conocimiento que el hablante manifestara tener sobre la lengua particular.
Hay que considerar que el bilingüismo no se presenta como una condición estática, sino que se desarrolla a lo largo del tiempo y conforme a determinadas condiciones, así existen diferentes tipos de bilingüismos, entre ellos, bilingües cordinados, incipientes, o descordinados. En otras palabras, hay personas que pueden hablar y entender ambas lenguas con niveles de competencias mas o menos iguales, hay otros que pueden entender la segunda lengua sin poder reproducirla oralmente (entiende pero no la habla) o solo conocen palabras sueltas de la segunda lengua.

El cuadro a continuación muestra la pregunta referida a la lengua.
Nº 26: ¿EN QUÉ IDIOMAS PUEDE TENER UNA CONVERSACIÓN? (SE PUEDE MARCAR MÁS DE UNA OPCIÓN)
1. No puede hablar..
2. Español…………….
3. Mapudungún ……
4. Aymara……………..
5. quechua…………….
6. Rapa Nui…………..
7. Inglés………………..
8. Otro……………..

Cuadro 1: La pregunta 26 de la boleta censal
Como se observa en el Cuadro 1, se combinan en las categorías de respuestas los idiomas de los pueblos originarios con los idiomas estándares que son enseñados como asignaturas obligatorias en todo el sistema educacional chileno (español e inglés) sin embargo, se presentan con un mismo status epistemológico, lo cual es una falacia comparativa(3). También llama la atención la alternativa nº 1 por su ambigüedad, no se puede entender qué es lo que se buscó descubrir con esta respuesta y por lo tanto requiere alguna explicación de su construcción. Si lo que se buscaba era tener un acercamiento al nivel de uso o al grado de competencia en la lengua indígena hablada, debería haberse preguntado también por la “comprensión” del idioma que es la mitad del ejercicio comunicativo.
Con esta única pregunta no es posible saber si la respuesta obtenida incluye o no a la población indígena que no es bilingüe equilibrada o avanzada, pero que sí entiende la lengua indígena, por ser la lengua de uso familiar o comunitaria, o tiene conocimientos de la lengua indígena asociados a un determinado campo de significación, por ejemplo el campo de la medicina y salud intercultural, la platería, la agricultura, el comercio, etc.

2. La metodología
Respecto a la metodología de aplicación, el censo 2012 utilizó un cuestionario monolingüe en castellano y fue aplicado en su mayoría por personas no indígenas, porque se asume que en Chile todos hablan español, afirmación aún no confirmada; pues existen lugares en comunidades indígenas más alejadas donde hay personas monolingües de mapudungun, como en la VIII Región, en la Comuna del Alto Bío Bío. La pertenencia o no a los pueblos indígenas no fue un requisito para ser encuestador en las comunidades indígenas.
También se observaron situaciones de inconsistencia en la aplicación del censo, al parecer, la preparación de los censista para abordar las preguntas referidas a los pueblos indígenas y a las lenguas en particular fue deficiente, ello quedó demostrado en los casos en que la misma gente encuestada pidió al censista que le aplicara la pregunta de autoidentificación, dado a que el encuestador la había omitido; incluso hubo casos en que el censista se justificó dando respuestas como “es que usted no parece ser indígena”. En otras oportunidades el censista simplemente se saltó las preguntas 24, 25, 26 y 27(4). Las irregularidades cometidas llevó a las organizaciones indígenas a que hicieran público su malestar por la mala aplicación del censo 20125.
De acuerdo a los antecedentes entregados, el censo 2012 no fue en censo lingüístico completo como los que han sido aplicados en otros países que cuentan con larga trayectoria en la materia, como el caso de la lengua Catalana que vine realizando censo lingüístico desde el año 1975.

3. Sobre los resultados
Los hablantes de mapudungun


El censo 2012 registra un total de 1.407.141 autoidentificados como mapuche de cinco años y más, 114.988 declara hablar la lengua mapudungun, que representa el 8,2 %, y su distribución por sexo es de 59.243 hombres (4,2%) y 55.745 mujeres (4,0 %). La pregunta 26 se aplica a la población total del país de 5 años y más.
En el Cuadro 2, se muestra que hay más niños hablantes de lenguas indígenas de 5 a 14 años que adolescentes (15-19 años), alcanzando un porcentaje de 7,3 %. Una razón posible que explica la cifra observada puede ser el aumento de la conciencia lingüística de los padres y abuelos, que les ha llevado a enseñar la lengua a los niños más pequeños, conciencia potenciada por la contingencia política en el país y por la movilización social indígena. Otra razón puede ser el efecto de las políticas de revitalización cultural impulsada por las instituciones públicas como son CONADI, MINEDUC –PEIB, organismos internacionales como la UNESCO, UNICEF, las Universidades, o también debido a la instalación de la asignatura de lengua indígena en 300 escuelas desde el año 2009 hasta la aplicación del censo, en primero, segundo y tercer año básico; con este programa los niños además de estudiar su lengua respectiva, cuentan con el respaldo de la escuela y de sus padres para aprender y valorar su cultura, lo que también implicaría un aumento de la autoestima.

En cambio, el número de hablante en los siguientes tramos es más bajo; 5% de 15 a 19 años; 5,6 de 20 a 24 años y 5,7 de 25 a 29 años. Estos tramos no rompen la tendencia a la disminución creciente de hablantes en la medida que se avanza a las nuevas generaciones. Una razón posible que influye en este resultado puede ser la crisis identitaria que afecta por naturaleza a los adolescentes, o la autonegación, la vergüenza étnica derivada de la discriminación racial.
El censo también dejó fuera a los niños indígenas menores de cinco años que tienen como su lengua materna, la lengua indígena. Sabemos que hay casos en el Alto Bío Bío, en la zona Rapa Nui, y en algunas comunidades de la IX Región, porcentualmente, son los menos, pero cuando una lengua está en peligro o amenazada con desaparecer este dato cambia la política lingüística, principalmente incide en la metodología de enseñanza y en la forma de abordar la promoción social del idioma.

Todas estas razones son posibles, pero lo más importante es destacar que hay un aumento de niños hablantes de lengua mapudungun, más que adolescentes, y que esto posiblemente se deba al aumento de la recuperación de la lealtad lingüística en algunos sectores de la población mapuche, lo que influye en el aprendizaje de la lengua por parte de los niños.

Cuadro 3. Diversidad y vitalidad lingüística en Chile. Población de 15 años y más:

Como se puede apreciar, en el cuadro N° 3, la lengua indígena porcentualmente más vital en su comunidad lingüística es el Rapanui, la que es hablada por casi el 41,7 % de la población con un total de 3.233 hablantes, en un segundo lugar se ubica el quechua con un 25,1%, luego el aymara con 13,3%, y finalmente el Mapudungun que alcanza a 8,2% de hablantes.
El gráfico además muestra el Inglés en el quinto lugar porcentual de uso en el país, alcanzado al 10,2% hablantes. Finalmente hay un 2,3% que declara hablar otras lenguas, entre ellas es posibles que se encuentren otras lenguas estándares europeas (francés, alemán, italiano, etc.) como las lenguas indígenas de escasa vitalidad (yagan selknam, kawescar). Numéricamente el inglés es la segunda lengua mas hablada en Chile, con 1.580.869 hablantes (este dato en la práctica puede ser cuestionado); en tercer lugar se encuentra el mapudungun con 129.267, cifra que corresponde al 0,8% del total de la población chilena de 5 años y más.
En el censo quedaron fuera los bilingües de las lenguas más vulneradas como el yagan, kawescar, selknam, y likan antay. Todas estas lenguas aún cuando no cuentan con hablantes maternos, o tienen un hablante como en el caso de la Abuela Cristina Calderón, de lengua Yagan, cuentan con experiencias de revitalización lingüística cultural, apoyados por el programa de Lengua Indígena del PEIB y la Unidad de Cultura de la CONADI. En las respectivas comunidades hay jóvenes y adultos promotores culturales y educadores tradicionales que enseñan la lengua indígena en la escuela; es decir, cuentan con personas que tienen niveles de bilingüismo y son activos en el proceso de recuperación lingüística.

El censo 2012 no dio cuenta de los tipos de bilingüismos existentes, tampoco explica por qué los pueblos indígenas aparecen vinculados o hablando otras lenguas indígenas cuando lo lógico debiera ser que se diera información sobre el nivel de conocimiento de su lengua.
Finalmente, la gráfica 4 muestra es que existen hablantes de la lengua mapudungun en los diferentes pueblos indígenas y que existe una población de 14.279 personas en la categoría “no pertenece a los pueblos indígenas” que declara ser hablantes del mapudungun. Ello se puede explicar porque hay casos donde personas no indígenas comparten con hablantes de mapudungun, otros han tomado cursos o hablan la lengua por motivos de trabajos, etc.

Gráfico 4: Otros pueblos que hablan Mapudungun:

4. Algunas conclusiones
Por lo ya señalado el censo 2012 cambia la historia de un censo culturalmente homogéneo en Chile, proyectando un instrumento que recoge el plurilingüísmo del país y que constata la diversidad cultural ya instalada; los próximos censos sólo tendrán que perfeccionar el instrumento y así levantar datos lingüísticos culturales más precisos.
Aunque el censo 2012 confirma la tendencia de la disminución del bilingüismo en los pueblos indígenas ya anunciados por la CASEN 2009, 2006, también es cierto que esta tendencia se quiebra en el grupo de niños de 5 a 14 años, que en vez de disminuir, tal cual se manifiesta en los otros tramos, aumenta. Es posible que ello se deba a la mayor lealtad lingüística de los abuelos y padres que han optado por enseñar su lengua a las nuevas generaciones o al efecto de las políticas de revitalización lingüística en aplicación y demandadas por los pueblos; o por ambas razones.
Siendo rigurosos, hay que decir que el Censo 2012 no alcanzó a ser un censo lingüístico completo, dado a que faltaron las preguntas para constatar los niveles de bilingüismos existentes, hemos de esperar que estos vacíos se superen el año 2022 o cuando se corrija el actual censo.
Por otro lado, queda un gran desafío para el movimiento de revitalización de las lenguas originarias, cómo hacer que el aumento de la autoidentificación indígena influya en el aumento de números de hablantes de las lenguas originarias, considerando que la tendencia al aumento de la autoidentificación ya quedó instalada. Para ello, hay diferentes estrategias en la agenda del fortalecimiento lingüístico de los pueblos, entre las cuales se encuatran: la propuesta de aumentar los programas de enseñanza de las lenguas indígenas en las escuelas y en la sociedad chilenas, el aumento del estatus social de las lenguas indígena y su instalación en los espacios públicos, la oficialización de las lenguas y el reconocimiento de los derechos educativos y lingüísticos de los pueblos indígenas, entre otros.

Bibliografía
CEPAL (2011) Conteo intercensal de población y vivienda. Serie Manuales N° 67 Santiago de Chile.
Encuesta CASEN 1990 y 2006 MIDEPLAN
Gundermann, H.,Caniguan J, Castillo, E ; Clavería A. y Faúndez, C. (2008) Perfil sociolingüístico de comunidades mapuche de la VIII, IX y X Región. UTEM-CONADI, Santiago.

Notas
Por Elisa Loncon Antileo; Académica de la Universidad de Santiago de Chile y Cordinadora de la Red por los derechos educativos y lingüísticos de los Pueblos indígenas de Chile.
2 Se agradece la gentil colaboración de Marcos Valdés tanto en la elaboración de la gráfica como en el análisis de la información.
3 Hay también aquí una dificultad de presentación de los resultados, porque esta pregunta es de multi respuesta: esto significa que una persona puede decir que habla una o varias lenguas y el INE presenta los resultados como si fuera mono respuesta.
4 Este caso es un ejemplo de irregularidad en la aplicación del Censo 2012. Al encuestado no le hicieron la Pregunta 24, ¿Se considera perteneciente a algún pueblo indígena?. Al no consultarle la pregunta 24 tampoco le realizaron la pregunta 25, ¿A cuál?. En la pregunta Nº 26, ¿En qué idiomas puedes tener una conversación? No se le dio la opción de la lengua indígena, solo le dijeron las opciones español o inglés. Luego no se señaló la opción de espiritualidad indígena en la pregunta Nº 36, ¿Cuál es su religión o credo?, por ejemplo, solo le dijeron la religión católica o protestante. Dato Recibido por la REDEIB Chile, 15.06.2012, Renca.