Miles de activistas ambientalistas junto a organizaciones sociales, campesinas y de mujeres piden a los países participantes que produzcan resultados.

Bajo la consigna de "Justicia climática" miles de activistas ambientales de diferentes países junto a miembros de organizaciones sociales, campesinas y de mujeres marcharon ayer por las calles de Copenhague, Dinamarca, pidiendo a los líderes de los países desarrollados menos palabras y acciones concretas para afrontar el cambio climático que amenaza la supervivencia de las naciones más pobres y vulnerables.
"Alerta. Alerta. América Latina camina por la vida" fue uno de los cantos más escuchados durante los aproximados seis kilómetros que recorrieron los manifestantes desde la plaza del parlamento hasta el Bella Center, sede de la décimo quinta reunión de Partes de la Convención de Cambio Climático de las Naciones Unidas (COP15), para llamar la atención de los líderes mundiales con el fin de que propongan metas ambiciosas que hagan frente al cambio climático.
Al frente de este movimiento, que paralizó la ciudad danesa, flameó la bandera de Bolivia y una Whipala portada por campesinos e indígenas bolivianos, algunos dirigentes del Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qollasuyo (Conamaq), quienes en diferentes comisiones de la COP15 piden el "respeto a los derechos de los pueblos indígenas y campesino y a la Madre Tierra".
En la sexta jornada de las negociaciones de la COP15, los manifestantes recorrieron las calles del centro de Copenhague portando carteles con leyendas como ¨… es hora de actuar", "No hay un plan B para el planeta", entre otros, hasta llegar a Bella Center e instalar una vigilia, ante un fuerte resguardo policial.
Los manifestantes repitieron una y otra vez su rechazo al mecanismo REDD (reducción de emisiones evitando la deforestación).
Los pueblos indígenas estamos en la COP para hablar de las amenazas a nuestra supervivencia cultural y vida que implican los impactos del cambio climático en nuestras comunidades, expresó el activista de la Red Ambiental Indígena Clayton Thomas Mueller. El concepto de deuda climática fue presentado por más de 50 países, significa una indemnización a los Estados en desarrollo por los daños que los países industriales ocasionaron en la atmósfera terrestre. para que se adapten a implantar estrategias para la reversión climática.
El CONAMAQ de Bolivia exige que se respete a la “Madre Tierra”.

Comunicadora de CONAMAQ
Luisa Miranda C.
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