Falta de bonificación forestal, alto precio del suelo y conflicto indígena, son algunos factores negativos, indicó ContesseDaniel Contesse, ejecutivo de Mininco, en el inicio de un ciclo de exposiciones sobre el sector, que organiza la UBB. Diario El Sur, 29 de marzo de 2001

jueves 29 de marzo de 2001


Daniel Contesse, ejecutivo de Mininco
''Hay un deterioro
del desarrollo forestal''

  • Falta de bonificación forestal, alto precio del suelo y conflicto indígena, son algunos factores negativos, indicó Contesse, en el inicio de un ciclo de exposiciones sobre el sector, que organiza la UBB.
En su conferencia ''El Desarrollo Forestal Chileno'', enmarcada en el ciclo de exposiciones organizado por la Universidad del Biobío que comenzó esta semana en el salón de honor de la Municipalidad de Concepción, el gerente de silvicultura y patrimonio de Forestal Mininco, Daniel Contesse, aseguró que existe ''un gran deterioro de nuestro desarrollo forestal'' debido principalmente a factores de orden político.

Contesse hizo hincapié en la brusca disminución del ritmo de nueva forestación en el país, y particularmente en la Región del Biobío, diferenciándola de la reforestación, que equivale sólo a plantar árboles donde ya había.

Sumadas la plantación de nuevos terrenos más la reforestación, éstas han disminuido del momento alto de 100 mil hectáreas anuales alcanzado en la década de los 80 a unas 60 mil hectáreas plantadas actualmente, lo que incluso es una cifra conservadora, puesto que no desagrega la tasa de forestación en nuevos predios, que se estima ha caído al menos en dos tercios.

Según el experto, la explicación para este fenómeno radica en el difícil clima para invertir o emprender que existiría en Chile, y particularmente para el rubro forestal, donde en la última década se eliminó la bonificación que existía durante los años 70 y 80 a la plantación forestal y por otra parte, se ha agudizado el conflicto de propiedad con las comunidades indígenas.

Contesse agregó que existen otros factores negativos que perjudican el sector, como son el alza del valor del suelo en algunas zonas, la falta de reglas claras y estables en algunas reparticiones públicas como la Conaf y la lenta tramitación de la Ley del Bosque Nativo en el Parlamento.

Finalmente insistió en la necesidad de recuperar los antiguos niveles de creación de masa forestal, lo que a su juicio se podría lograr si se aprovecharan las 1,5 millones de hectáreas aptas exclusivamente para el cultivo forestal en la Región del Biobío (50% de la superficie total), en circunstancias que actualmente existen 500 mil hectáreas plantadas.

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