En relación a los hechos de violencia en la comunidad Wente Winkul Mapu que se han registrado recientemente y difundido amplimente por la prensa local y nacional, la Fundación Instituto Indígena, señala a la opinión pública lo siguiente:

1.- Que rechazamos tajantemente cualquier acto de violencia que atente contra derechos fundamentales de las personas como la vida y la integridad física. Especialmente aquellos que han acabado con diversas lesiones en sus cuerpos.

En tal sentido estimamos como injustificados, carentes de motivos y desproporcionadas las acciones emprendidas en contra de personas mapuche, especialmente de don Venancio, de 78 años y de algunos menores de edad, quienes resultaron lesionados, el primero gravemente en su pierna y dentro de su casa, y los segundos también con heridas (otros tantos amedrentados al observar el abusivo procedimiento policial, recibiendo amenazas de disparar en su contra), esta situación no se puede tolerar más y es necesario un verdadero compromiso en el respeto de los derechos de los pueblos originarios, pues las personas mayores en las comunidades toman un rol fundamental, en este caso se hace referencia a un kimche (sabio).

Hemos sido testigos de cómo diversos actos han terminado con marcas físicas en personas de esta y otras comunidades, los que por años han demandado por parte del Estado la solución a la problemática de tierras y territorios, lo anterior como consecuencia de distintos operativos realizados bajo la premisa de dar cumplimiento a diversas instrucciones.

2.- Así mismo creemos oportuno hacer notar el reclamo ante los procedimientos y línea investigativa que ha tomado el Ministerio Público, sumado a su insuficiente criterio para anticiparse a hechos que consabido revisten cierto riesgo, exponiendo a funcionarios de las Fuerzas de Orden Público y a personas de la Comunidad dentro del hostil ambiente existente en la región.

En tal sentido, estimamos que como sociedad civil debemos rechazar cualquier acto de violencia y no debe quedar indiferente para los Órganos Públicos, las lesiones por parte del personal de servicios como de los miembros del Pueblo Mapuche, ni menos tolerarse como una consecuencia normal ni habitual de los procedimientos judiciales actos como los recientemente conocidos en la Comunidad Wente Winkul Mapu.

3.- Pertinente también es mencionar la expectativa frente a las promesas hechas por el Presidente de la República en el discurso del 21 de mayo, que contenía ofrecimientos relativos a la valoración de los pueblos originarios, expresando dar “un nuevo trato… en identidad, cultura y tradiciones” y el anuncio de la creación de una nueva Área de Desarrollo Indígena dentro de la zona de Ercilla, estimamos que dichas ofertas no se condicen con el accionar del gobierno ante las peticiones de las comunidades y ante la ofensiva de los funcionarios policiales.

4.- Buscamos en esta presentación hacer un llamado de atención a practicar con cuidado, esmero y fiel apego a la realidad la calificación médica hecha a las lesiones sufridas por los comuneros, por cuanto resulta ininteligible que las primeras evaluaciones arrojen como resultado lesiones leves, para más tarde sean recalificadas dada la gravedad de las víctimas.