A penas se dio a conocer que Alejandro Peña, ex fiscal del bullado caso Bombas, las reacciones tanto de los políticos de oposición como en las redes sociales no trepidaron en rechazar el nombramiento del ahora funcionario del Ministerio de Interior.

Las reacciones no se dejaron esperar a penas se supo que Alejandro Peña, ex fiscal del bullado caso Bombas, tanto políticos de oposición como en las redes sociales, quienes no trepidaron en rechazar el nombramiento del ahora funcionario del Ministerio de Interior, quien se encuentra en La Araucanía para crear una unidad permanente y especializada de abogados para el seguimiento de las querellas criminales, relacionadas a la situación de violencia en la zona.

Lapidario, por decir menos, fueron los comentarios del senador Eugenio Tuma, quien calificó que “no pudimos quedar en peores manos ya que su llegada a la región no da garantías para liderar ningún proceso, programa o acción tendiente a resolver el conflicto mapuche y menos para encontrar a los responsables de estos atentados que afectan la paz social de nuestra región”.

El parlamentario de la Araucanía sostuvo que la designación del Ex fiscal Peña quien renunció por el conocido montaje en el caso bombas y que viene designado por el gobierno a hacerse cargo de un programa especial en nuestra región, “pone en serio riesgo la paz social de la Región, no da garantías de respeto de los derechos humanos de las comunidad mapuches y no mapuches y confirma el desinterés del gobierno con La Araucanía”.

Asimismo, a través de su cuenta en Twitter en Senador Jaime Quintana señaló que "El ex fiscal peña en la araucania es una decisión que refleja la cantidad dantesca de errores del gobierno en política indígena".

También Hilario Huirilef, Consejero Regional, calificó “como un fracaso para los Gobernadores e Intendente de La Araucanía.Esta señal desde Santiago nos indica que los dos Gobernadores y el Intendente tendrían que irse para su casa, ya que tuvieron que venir fuera de nuestra región a coordinar las acciones y programas, que además no apuntan al fondo de un problema estructural e histórico”.