Arzobispo de Concepción aseguró que la Iglesia mantendrá su mediación mientras “haya uno que no se sume a la vida”. “Testigos protegidos” es principal traba para un acuerdo, señaló

A la par de su homólogo de Temuco, Manuel Camilo Vial, también el arzobispo de Concepción, Ricardo Ezzati, continúa con las gestiones para conseguir un acuerdo con los mapuches de Angol que permita el fin de su huelga de hambre.

A la reunión en Victoria del obispo Vial con representantes de este núcleo duro que no aceptó la negociación del viernes, se suman las conversaciones que el propio Ezzati ha entablado con Víctor Queipul, uno de los voceros de Angol.

“He conversado telefónicamente con el lonko Víctor (…) Espero seguir dialogando, esperamos encontrarnos y ofrecer lo que se pueda ofrecer para que el diálogo pueda continuar para llegar a un buena conclusión”, comentó hoy el obispo de Concepción.

La principal traba para conseguir un acuerdo es la insistencia de los huelguistas contra los testigos protegidos utilizados por el Ministerio Público, además de la garantía de que la Fiscalía no aplique efectivamente la Ley Antiterrorista. “En este instante la mayor dificultad para un acuerdo pasa por los testigos con rostro oculto que se pretende utilizar en los juicios", señaló Ezzati.

El obispo planteó que el diálogo continuará en pie, dado que “mientras haya uno que no se sume a la vida, vamos a estar preocupados”. Además, señaló que pese al acuerdo alcanzado con los comuneros que levantaron la huelga, la situación de los mapuches de Angol siempre estuvo presente.

“No se ha querido nunca excluir de la mesa del diálogo a los comuneros de Angol. Siempre han estado presentes, se han marginado del diálogo a último momento, pero incluso una vez firmado el acuerdo nunca se pensó que estaba todo terminado", aseguró.

En otra arista de las gestiones de los comuneros de Angol, los voceros del grupo sostendrán el jueves una reunión con el presidente de la Corte Suprema, Milton Juica.