Unas 200 mujeres mapuche marcharon este lunes en la ciudad de Angol para pedir al Presidente Sebastián Piñera “voluntad política” para poner fin a la huelga de hambre que mantienen hace un mes 32 presos políticos de esta etnia.

El “werkén” (portavoz) de la comunidad de Temucuicui, Jorge Huenchullán, informó a Efe que el objetivo de la marcha era trasladar al gobierno la preocupación que existe por la grave situación de salud que enfrentan los reos que están en huelga de hambre líquida en diferentes cárceles del sur desde el pasado 12 de julio.

“Se quiere demostrar que hay un descontento generalizado del mundo mapuche y que las mujeres, madres y hermanas de los presos están sufriendo”, apuntó.

Los presos están procesados o condenados por su presunta implicación en ocupaciones ilegales de tierras e incendios de instalaciones agrícolas, en el marco del llamado “conflicto mapuche”, que enfrenta a comunidades indígenas con empresas agrícolas o forestales de La Araucanía.

Al llegar a la gobernación provincial de Malleco las mujeres, acompañadas por sus hijos, entregaron una carta dirigida al mandatario en la que instan a su administración a hacerse cargo del tema y en la que exigen que se abra un diálogo sobre sus demandas para poner fin a la situación.

“Tiene la solución en sus manos. Pasa por una voluntad política por parte del Estado”, explicó a Efe Huenchullán, que señaló que esperan “un signo de diálogo y de preocupación”.

La principal demanda de los reclusos es el fin de los procesos por la legislación antiterrorista, que supone condenas más duras y limitaciones al derecho a un juicio justo y debida defensa.

Además, en la carta, en la que se da cuenta de la “situación de represión y vulneración que existe en el sur”, se pide el fin de la persecución a los dirigentes de esta etnia y al doble procesamiento, civil y militar, que se les aplica.

El portavoz de la comunidad de Temucuicui explicó que la situación de los huelguistas, que han perdido entre 7 y 12 kilos de peso y presentan náuseas, mareos, desorientación, bajas de presión arterial y calambres, es “muy delicada”.

Sin embargo, aclaró que la huelga de hambre es “indefinida” hasta no tener una respuesta definitiva por parte del Gobierno.

“Si el Gobierno se muestra contrario a esa situación los hermanos están dispuestos a llegar a las últimas consecuencias porque están siendo procesados y juzgados por una ley que vulnera cualquier tipo de derecho”, sentenció.

En cuanto a los documentos que supuestamente vinculan a los mapuches en el conflicto con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), publicados por la Fiscalía en las últimas semanas, Huenchullán dijo que son "errados" y no tienen fundamento.

Según el portavoz mapuche “se está buscando por todos los medios interpretar algún tipo de vínculo con grupos guerrilleros que no existe”.

“Se está prejuzgando a los mapuches y se está criminalizándoles y haciendo creer a la opinión pública que verdaderamente somos terroristas”, concluyó, tras denunciar que “es una política que ha venido emprendiendo el Estado desde hace mucho tiempo”.