Comunero condenado en Cañete completó este jueves 59 días en huelga de hambre. El año pasado, en un ayuno que sostuvo por más de 70 jornadas, perdió 24 kilos. Los otros tres sentenciados han bajado entre 14 y 20. Uno de ellos fue llevado al hospital por problemas cardíacos.
Florinda Carrillanca (73), madre de Héctor Llaitul (41), informó este jueves que su hijo ha bajado 19 kilos desde que inició su segunda huelga de hambre, el 15 de marzo pasado, en protesta contra el juicio de Cañete que lo condenó por el atentado al fiscal Mario Elgueta.La madre del líder de la Coordinadora Arauco Malleco presenció esta mañana la apertura de los alegatos por el recurso que busca anular el juicio contra Llaitul y otros tres miembros de la CAM: Ramón Llanquileo Pilquiman, José Huenuche Reiman y Jonathan Huillical Méndez.
Natividad Llanquileo, vocera de la huelga de hambre del año pasado y también presente en la audiencia, informó Huillical fue trasladado al Hospital de Victoria por problemas cardíacos, aunque después volvió al penal de Angol, donde se encuentran los condenados a la espera del fallo.
La joven es hermana de Ramón Llanquileo, quien –según indicó- “es monitoreando cada media hora (...) tenía algunas alteraciones que vio Gendarmería, ya que están bastante delgados y presentan problemas”. Según los últimos reportes, han bajado entre 14 y 20 kilos.
Florinda Carrillanca recordó que Héctor Llaitul perdió hasta 24 kilos en la huelga de hambre del año pasado, ocasión en que el líder de la CAM mantuvo el ayuno por poco más de 70 días, aunque algunos de los presos mapuches permanecieron sin ingerir alimentos hasta 82 días.
“Él y sus compañeros no alcanzaron a recuperarse de la anterior huelga de hambre. Están débiles y se quedan dormidos solos, pero no por sueño, sino que por ese decaimiento que tienen”, señaló la madre de Llaitul, quien viajó desde Osorno a presenciar los alegatos.
En la cárcel de Angol, en tanto, los cuatro comuneros fueron visitados por los senadores PPD Guido Girardi y Jaime Quintana. A la salida del penal, los parlamentarios expresaron su preocupación por los 59 días de huelga de hambre que los mapuches completaron este jueves.
“Creo que ellos, como ciudadanos de este país merecen un juicio justo, no es posible este doble estándar donde ellos, a pesar de no haber hechos de sangre, tengan condenas de 25 años y quienes mataron a Mendoza Collío ni siquiera tengan tres años de pena remitida", señaló Girardi, presidente del Senado.
En el juicio de Cañete, Llaitul fue condenado a un total de 25 años de cárcel por el homicidio frustrado del fiscal Mario Elgueta y por el robo con intimidación al campesino José Santos Jorquera. Los otros tres mapuches recibieron penas de 20 años de presidio cada uno por los mismos delitos.
La defensa de los comuneros recurrió de nulidad del juicio a la Corte Suprema, por estimar que se vulneraron los derechos constitucionales de los imputados. Los alegatos comenzaron este jueves y se espera una decisión para el próximo lunes.