![]() |
El abogado comentó al respecto que "se trata de un delito muy grave, sancionado por el artículo 397 Nº1 del Código Penal con una pena que va de cinco años y un día hasta diez años de cárcel".
Madariaga agregó en relación a lo anterior que "puede que la pena sea aún mayor, puesto que concurren seis circunstancias agravantes. La primera de ellas está señalada en el artículo 12 Nº4 del Código Penal, ya que cuando la menor estaba en el suelo, producto de la herida de la escopeta, recibió otro impacto de una bomba lacrimógena en su brazo. Una segunda circunstancia agravante es que los agresores abusaron de la superioridad de su sexo, de su fuerza y de sus armas para cometer el delito".
"Además -explicó el profesional- se valieron del carácter de funcionario público que tienen estos sujetos. A esto hay que sumarle que el delito fue ejecutado con auxilio de gente armada y en despoblado. Finalmente, la sexta agravante contemplada en el número 18 del artículo 12 del Código Penal, es que el delito se llevó a cabo con ofensa y desprecio del respeto que por su edad y sexo se merecía la víctima".
Asimismo, el jurista manifestó que "en el hecho también se vulneraron dos garantías constitucionales: el derecho a la vida y a la integridad física y síquica de esta menor; y la inviolabilidad del hogar pues se entró en él por la fuerza y se le disparó sin tener nada que ver".
Cabe
mencionar que esta querella es la primera que se realiza en virtud de la
Reforma Procesal Penal en contra de uniformados, y será un fiscal
del Ministerio Público -y no un fiscal militar- el que se encargará
de velar por el éxito de la investigación.
NO SE JUSTIFICA
Madariaga enfatizó que lo ocurrido es increíble, ya que "la casa de la menor se encuentra muy lejos de la zona de conflicto, pues queda a 15 kilómetros del fundo Santa Elisa y a 3 del fundo El Carmen. Pienso que no hay nada que justifique este atentado contra la niña".
Para el abogado, lo sucedido "es un delito cometido por un delincuente, o quizás por más de uno, pues se disparó por la espalda a una menor de 12 años. Es por ello que interpusimos la querella para que se determine quiénes son los autores, los cómplices y los encubridores de este hecho".
En cuanto a una posible solución a estos sucesos, el profesional expresó: "la solución de fondo para el conflicto mapuche no la puedo encontrar en este momento. Pero sí hay una cuestión concreta en este caso y es que se debe hacer justicia, sancionando a los delincuentes. Por ello, el fiscal del Ministerio Público debe hacer la investigación, y ordenar que los sujetos sean detenidos, procesados y encarcelados una vez que sean condenados por lo que hicieron".
¿QUIEN DISPARO?
Consultado
por el origen de los perdigones que hirieron a Daniela Ñancupil,
sostuvo que "la menor dijo que se le disparó a cinco metros de distancia,
siendo impactada por ocho perdigones que aún están en su
espalda. Y los cartuchos de escopeta de Carabineros efectivamente tienen
ocho perdigones. Hay que ser sinceros: si la menor contó que se
bajaron cuatro carabineros del bus y uno le disparó a quemarropa,
está muy clara la situación".