NO CREEN QUE MAPUCHES ESTEN "INFILTRADOS":
Obispos Median
en Conflictos Indígenas
Integrantes de la Asamblea Episcopal
de Chile apoyan la vía del diálogo para una solución
a sus demandas.
Según obispo de Temuco, Sergio
Contreras, la situación no es comparable al levantamiento de Chiapas,
en México.
Se realizaron homenajes a los cardenales
Carlos Oviedo Cavada y Raúl Silva Henríquez, ambos fallecidos
recientemente.
El
obispo de Temuco, monseñor Sergio Contreras, descartó ayer
la posibilidad de que movimientos extremistas armados se hayan infiltrado
en las comunidades mapuches y estén participando en las "tomas"
ilegales de predios en la zona sur del país.
El prelado dijo también que
los pueblos indígenas no tienen armas y que son pacíficos,
"a lo más emplean el palín y las piedras", comentó,
tras dar cuenta de los conflictos suscitados entre mapuches y empresas
forestales
Según monseñor Contreras,
quien es conocedor del conflicto de la Araucanía, tampoco es posible
en Chile comparar la situación de "tomas" en el sur con el levantamiento
indígena en Chiapas.
"Son realidades muy distintas que no
se asemejan porque, insisto, nuestro pueblo mapuche es pacífico",
reafirmó, dando cuenta pormenorizada de la situación que
se vive en cada una de las regiones donde se han registrado las ocupaciones
ilegales.
Tales declaraciones las formuló
tras concluir ayer la 77 Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal,
realizada esta semana en Punta de Tralca, donde los obispos católicos
analizaron los problemas del desempleo en Chile, la situación del
pueblo mapuche y la importancia de la catequesis,
La jornada, presidida por el arzobispo
de Santiago, monseñor Francisco Javier Errázuriz, consideró
también un sentido homenaje en memoria de los cardenales Carlos
Oviedo Cavada y Raúl Silva Henríquez, fallecidos ambos en
el lapso de cuatro meses.
Dentro de las conclusiones del plenario,
el obispo de Temuco, Sergio Contreras, señaló que los actuales
conflictos indígenas en la zona sur tienen antecedentes históricos
de largo tiempo de ocupaciones, dominios y derechos de las tierras.
Planteó que las empresas forestales
de hoy no son necesariamente responsables de los procesos anteriores. Pero
no deben desconocer que los mapuches perdieron, de una u otra manera, grandes
extensiones de tierra.
El prelado dijo que ojalá se
logre un incremento de tierras con recursos tan generosos como los que
en el pasado se concedieron para favorecer la forestación.
No obstante ello, enfatizó que
es necesaria la capacitación para el verdadero desarrollo social,
especiamente mediante la educación - respetando la propia cultura-
, les permita enriquecerse con los conocimientos y las técnicas
del mundo moderno, y pueda resolverse la grave pobreza en la cual hoy se
encuentran también las comunidades.
Asimismo, llamó a los mapuches
a abandonar la vía de las tomas ilícitas de terrenos para
lograr sus objetivos.
MENSAJE DE OBISPOS A
EMPRESARIOS FORESTALES
En un explícito mensaje a los
empresarios forestales, los obispos pidieron que estos sectores acepten
que una solución verdadera a los conflictos que hoy les preocupan
requiere la comprensión de los principios establecidos por la ley
indígena.
"Y que deseen, a impulsos del amor,
ir más allá de la justicia legal para procurar que la paz
tenga raíces y vínculos verdaderos. Mucho ayudarán
las relaciones de buena vecindad con los mapuches", declararon.
Los prelados, al mismo tiempo, alabaron
y apoyaron la vía del diálogo emprendida por el Gobierno,
así como la creación de la comisión especial, cuya
misión es encontrar caminos más ágiles de aplicación
de la ley indígena para resolver los problemas de fondo.
"Esperamos que las autoridades civiles
favorezcan la aplicación de medidas de tipo administrativo que puedan
ser un verdadero avance en favor de la paz", concluyeron.
Respecto de otro tema que motivó
la preocupación de los obispos - el desempleo- , analizaron la situación
económica que afecta a muchos chilenos, en particular a los jóvenes,
formulando un llamado a todos para buscar nuevas y eficaces soluciones
solidarias.
PREPARACION DEL SINODO
DE OBISPOS EN EL 2000
Otro tema central de esta asamblea
plenaria fue la catequesis, respecto de la cual se dijo que la educación
de la fe es una preocupación central en la acción evangelizadora
de la Iglesia porque gracias a ella se puede conocer, comprender y vivir
mejor la fe.
La catequesis familiar, llevada a cabo
por miles de catequistas adultos, fue calificada como "un paso de gran
importancia" para incorporar a las familias chilenas en la preparación
de sus hijos para su primer encuentro personal con el Señor.
La asamblea plenaria también
se pronunció sobre los aportes que hará llegar a la Santa
Sede para la preparación del Sínodo de los Obispos que se
celebrará en Roma el año 2000 sobre el ministerio episcopal.
La redacción definitiva del
documento que hará llegar el Comité Permanente de los obispos
se está revisando.
Los obispos recibieron asimismo un
informe y un conjunto de proposiciones para la celebración del Gran
Jubileo del año 2000.
En este aspecto se acordó que
la inauguración del año jubilar se efectúe en la catedral
de cada una de las diócesis del país esta Navidad, así
como también se harán "jubileos sectoriales", en particular
los de la familia y los jóvenes.
En noviembre del 2000 se realizarán
congresos eucarísticos en todas las diócesis, culminando
con uno nacional que se efectuará en Santiago.
En esta jornada, asimismo, se leyó
un oficio enviado por el secretario de Estado del Vaticano, cardenal Angelo
Sodano, dirigido a monseñor Francisco Javier Errázuriz, en
el cual el Santo Padre agradece las muestras de afecto y comunión
eclesial expresadas en el atento mensaje que le enviaron los obispos chilenos.
Trascendió, por último,
que no sería tan factible que se nombrara en el corto plazo a un
nuevo Cardenal en Chile, como se había informado en noticieros de
la televisión española en estos días.
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