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Lunes 21, de Septiembre de 1998© Copyright El Mercurio S.A.P., Prohibida su reproducción 

65 Empresas Firman Compromiso:

Sector Forestal Busca Revertir Proceso Destructivo del Suelo 

La idea es utilizar los bosques para generar riquezas que apunten a erradicar la pobreza, detener la erosión, mejorar los suelos, reducir la contaminación atmosférica y el efecto invernadero.

CONCEPCION (Patricio Gómez)- El mayor desafío medioambiental que tiene el sector forestal chileno es revertir el proceso de destrucción de millones de hectáreas de suelo entre la Quinta y Décima Región, debido al grave proceso erosivo que las afectan. Sólo en la Octava Región hay un millón de héctareas en esa condición y la gran tarea es acelerar la reforestación.

Así lo destacaron los máximos ejecutivos de la Corporación Nacional de la Madera, Corma, al suscribir 65 empresas afiliadas a esa entidad en la Octava Región una declaración de valores ambientales. El compromiso apunta a utilizar los bosques para el desarrollo de Chile con un quehacer responsable que constribuya a erradicar la pobreza, en especial la rural y regional, haciendo aportes para detener la erosión, mejorar suelos, reducir contaminación atmosférica y el efecto invernadero.

El presidente regional de la Corma, Jorge Serón, destacó que ese acuerdo adquiere especial significación en la VIII Región, donde se concentra más del 50% de la actividad productiva forestal de Chile. Para ello cobra cada día más fuerza el concepto de ecoeficiencia, vale decir, ser capaces de generar beneficios económicos, minimizando los impactos ambientales negativos que las operaciones, tanto en el bosque como en la industria, pudiesen tener.

Resaltó que el reciente estudio que desarrollara Conaf y la Conama sobre el catastro y evaluación de los recursos nativos de Chile, reveló que hoy hay más bosque nativo que hace 30 años, con 13,5 millones de hectáreas, lo que representa el 18% de la superficie nacional.

Advirtió que pese al gran desarrollo del sector forestal chileno queda mucho por hacer y tal vez el mayor desafío es revertir el proceso de destrucción que sufren millones de hectáreas de suelos entre la Quinta y la Décima región del país, "producto del grave proceso erosivo que los afecta".

Serón enfatizó que esa es la gran tarea mediombiental de Chile y las plantaciones forestales son una buena solución para incorporar a la economía este tipo de superficies.

Al profundizar en el tema señaló que sólo en la Octava Región hay un millón de hectáreas de suelos descubiertos en fuerte etapa de erosión, que esperan el beneficio de la forestación: "Ese es un imenso trabajo que tenemos por delante, el sector privado, el Estado y las universidades, en cuanto a hacer uso de la naturaleza bajo condiciones de sustentabilidad".

Los casi dos millones de hectáreas de plantaciones creadas en los 20 últimos años en el país, de las cuales 800 mil se encuentran en la Octava Región, reflejan la vocación forestal del país. "Chile, con todos esos bosques establecidos en más de un 90% sobre suelos erosionados, ya no es el mismo y los valores ambientales que suscribimos son la confirmación de esos principios, para continuar creciendo bajo el respeto por el medioambiente con el único objetivo de alcanzar plena sustentabilidad en el desarrollo nacional", enfatizó.

Las exportaciones forestales del país superaron los 2 mil millones de dólares durante 1997, y se espera que la cifra llegue a los 1.800 millones este año, principalmente por efecto de la crisis asiática y algunas fluctuaciones de precios en mercados internacionales para productos como la celulosa.

POSICION DE CONAMA

En tanto, el director regional de la Conama, abogado Bolívar Ruiz, coincidió en el sentido de que la erosión de los suelos constituye uno de los problemas ambientales más graves de la región y del país, valorando el hecho de que las empresas de esta zona se comprometan implícitamente en un desarrollo basado en el respeto al uso racional de los recursos naturales.

Destacó que la Conama ha estructurado un grupo mixto de trabajo con el sector forestal, universidades y organizaciones no gubernamentales, para generar desde esta región una norma de emisión que controle los compuestos derivados de la fabricación de la celulosa, la que tendrá vigencia en todo el país.

Ruiz calificó como el segundo problema ambiental de la región la erosión o pérdida de capacidad productiva de los suelos pues no es menor que un tercio de las tierras de la zona que están en esa condición. "Quiero valorar que una organización empresarial ponga el dedo en la llaga tan abiertamente desconocida por la opinión pública. Muchos nos preocupamos por la contaminación de las bahías o ríos, pero pocos hablan del deterioro progresivo de nuestros suelos", manifestó.

Para subsanar esta situación adelantó que están trabajando una propuesta para que sea acogida por el organismo que corresponda en cuanto a que rescatar nuestros suelos es tarea prioritaria y se precisa una línea estratégica de trabajo regional que definió como único camino para lograr un desarrollo sustentable.

FERNANDO LENIZ

El ex presidente ejecutivo nacional de la Corma, Fernando Léniz, bajo cuya presidencia a la que renunció hace sólo un mes se firmó el compromiso, dijo que este compromiso ambiental público asumido por ese sector es una respuesta a una necesidad que en Chile "ha llegado tardíamente"con respecto a otros países y que está manifestando en todas partes del mundo.

Reconoció que nuestro país, con ingreso per cápita de unos 5.500 dólares, no puede destinar demasiado de esos recursos a la ecología y tiene una necesidad de crecer ineludible, que traerá necesariamente alteraciones al medioambiente, pero éstas deben hacerse sin dañarlo.

Léniz advirtió que las empresas forestales son las primeras que han detectado la degradación de los suelos, siendo un problema ambiental que no le había tomado el peso. Explicó que esa realidad nace en una parte importante en cómo estaba distribuida la propiedad de la tierra, debido a que hay muchos de esos suelos que corresponden a propiedades de colonos que vivieron de la agricultura, pero su uso prolongado genera erosión.

Dijo que también preocupan las soluciones que se pretende dar a los sectores indígenas del país en las distintas zonas del país, porque los llevarán a cultivos agrícolas en sectores y suelos delgados con bajos niveles de precipitaciones, lo que producirá más erosión y son terrenos a los que hay buscar fórmulas para que se puedan forestar. Insistió en que "es un grave error" sostener que las etnias tienen conflictos con las empresas forestales, cuando lo que ocurre es que lo enfrentran es un problema de probreza rural. " No se van a resolver los problemas dándoles más terrenos que son inapropiados para cultivos agrícolas, sin que cuenten con los medios financieros y las tecnologías para vivir de esa agricultura", advirtió.


El Mercurio  GDA