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31 de Octubre del 2001
Sobre las acusaciones
que pesan sobre Marcos Huaquilaf, director de la Conadi en Santiago, el
titular de la entidad, Edgardo Lienlaf, dijo que si bien algunos trabajadores
han aportado antecedentes sobre situaciones anómalas a la ministra
de Mideplán, ello no es suficiente aún para articular una
acción en su contra.
- ¿Cómo
interpreta que varios dirigentes de Santiago se reunieran el miércoles
con la ministra de Mideplan, Alejandra Krauss, para manifestarle lo mismo
que está en la carta?
- Este es un tema administrativo.
No lo queremos vincular a otros elementos que no correspondan. Una primera
impresión es que aquí hay una discusión política
y no quiero entrar en ese juego. Y si la gente presentó un documento
nosotros debemos estudiarlo.
La discusión política a la que alude el director de Conadi es por la dirección nacional. En tal sentido, el nombre Huaquilaf (PS) ha sonado como su eventual sucesor.
- ¿Usted ha conversado
últimamente con Marcos Huaquilaf?
- No en forma periódica,
pero sí. Lo que nosotros queremos es que esto no se confunda
con ningún elemento político. Que no se confunda que es una
persecución (el sumario), sino que son atribuciones propias de un
servicio público.
- ¿Usted descarta
persecución en contra de las autoridades de la Conadi en Santiago?
- Que ahora algunos dirigentes
se atrevan a entegar antecedentes, que se hayan reunido con la señora
ministra, son hechos que se agregan y que hay que investigar, pero en ningún
caso son una sumatoria de elementos preparados para articular una acción
en contra de cualquiera.
- ¿Estos hechos
están afectando el funcionamiento de la Conadi en Santiago?
- Se está ejecutando
lo que debe hacerse. Pero insisto, mi duda es si estamos en sintonía
con nuestros beneficiarios y es nuestra preocupación de un tiempo
a esta parte. La idea es remediar eso en el corto plazo y mejorar las relaciones
humanas al interior de la Corporación. Somos un servicio particular,
muchos de nuestros funcionarios son indígenas y eso se refleja en
la relación con nuestros usuarios, la que debe ser bastante más
armónica de lo que se ve a simple vista en la oficina de Santiago.
Las irregularidades en el FDI
Lienlaf explicó que en relación con el Fondo de Desarrollo Indígena (FDI) se trabaja en conjunto con Mideplan y la Dirección de Presupuesto porque "efectivamente en relación con los montos invertidos no habíamos logrado cotejar si los proyectos se desarrollaron. Es un tema país, no sólo en Santiago, donde desde el punto de vista administrativo no se habían cerrado los proyectos".
- Hasta el momento, ¿qué
conclusiones se tienen?
- Tenemos una información
preliminar de varias oficinas, entre ellas Santiago, que dice que existirían
este tipo de falencias, propias de una institución nueva y que debemos
mejorar. Hay carpetas (de los proyectos) que están incompletas.
- ¿Hay dineros
que no han sido rendidos?
- En una primera impresión
sí, pero hay que ver el final. En ese proceso de regularizar pudiera
ser que los documentos estén.
- ¿Se constata
la entrega de dineros a asociaciones que tenían deudas pendientes
con la Corporación?
- Sólo teníamos
los convenios firmados y la entrega de recursos, pero no sabíamos
si los proyectos se cumplieron y si se habían entregado la rendiciones.
Por ello puede ser efectivamente que de un año a otro cualquiera
de las organizaciones pudiera nuevamente recibir recursos.