REGIONALES
Centro de Documentación Mapuche Documentation Center
13 de marzo de 2001
 
Acuden al presidente para mantener sus tierras centenarias
 

San Carlos de Bariloche.- Dos familias mapuches con más de un siglo en tierras próximas a Bariloche, en litigio con el Ejército, recurrieron al presidente Fernando de la Rúa para mantener su asentamiento, que durante la dictadura fue bombardeado por militares en un intento de extinguir la vieja disputa.

Los afectados son unas 60 personas de la etnia Trypan Anty, del asentamiento Virgen de las Nieves, establecido a 15 kilómetros de San Carlos de Bariloche medio siglo antes del surgimiento de la Colonia Nahuel Huapi, que luego se transformó en la ciudad y centro turístico más importante de la región lacustre.

Hace 150 años llegó al lugar la familia Ranquehue, proveniente de la hoy provincia de La Pampa, y desde entonces permaneció allí a través de cinco generaciones sucesivas: luego, hace 105 años, se sumaron los Gualmes, también para quedarse en el asentamiento.

A principios del siglo XX, a la comunidad la integraban además otras familias, también mapuches, como los Báez, los González y los Díaz, desalojadas compulsivamente durante la dictadura y que ahora quieren regresar al sitio ancestral.

El litigio con el Ejército comenzó en 1937, cuando Parques Nacionales transfirió tierras de ese lugar a esta fuerza armada, sin contemplar que allí vivían varias familias mapuche, con una organización comunitaria muy desarrollada, dedicadas a la ganadería, la siembra de trigo y maíz y la molienda.

Desde entonces, los militares intentaron desalojarlos nueve veces, tanto mediante presentaciones en los tribunales como por la fuerza, como cuando durante la última dictadura bombardearon el lugar y cortaron con motosierras las casas de madera y cartón, según denuncias de las familias reprimidas.

Los habitantes del asentamiento se refugiaron entonces en los bosques, pero luego muchos volvieron a las tierras que consideran sagradas y de su pertenencia ancestral.

Debido a las presiones, sin embargo, muchas familias desistieron y en los últimos años sólo resisten los Ranquehue y los Galmes, con un total de 60 miembros.

Tras muchos años de litigio en tribunales y varios fallos adversos, las familias acosadas recurrieron ahora a De la Rúa para pedirle que use sus atribuciones en línea con la preocupación manifestada en reiteradas oportunidades por el jefe del Estado respecto de las comunidades indígenas.

Los mapuches recurrieron a De la Rúa también en su calidad de comandante en jefe de las Fuerzas Armadas y porque el predio en conflicto está asentado como propiedad del Estado Nacional y no del Ejército.

En el texto presentado en la Casa de Gobierno las familias indígenas recuerdan que De la Rúa, cuando era senador, fue autor de la ley que creó el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), tras lo cual el tema fue incorporado a la Constitución Nacional en la reforma de 1994.

En el artículo 75 de la Carta Magna -enfatizan-, esas cuestiones quedan "directamente bajo la órbita del Presidente de la República".

También sostienen que el tema es competencia del Presidente debido a que el conflicto comenzó cuando Parques Nacionales transfirió el dominio de las tierras en litigio al Ejército, en un trámite para el que los denunciantes piden nulidad.

En un escrito de 41 páginas, que contiene antecedentes del caso y jurisprudencia nacional e internacional sobre el tema, los mapuches piden a De la Rúa que suspenda el proceso de ejecución de la sentencia de desalojo en curso y que se gestione un título de propiedad comunitario a su favor.

En este último punto también solicitan que se declare al lugar "Territorio indígena protegido", en función de la posibilidad de un manejo conjunto a realizar entre la Administración de Parques Nacionales (APN) y la Comunidad Trypan Anty, que los reúne y "que ocupa tradicionalmente el predio".

Un capítulo de la presentación consigna una completa reseña histórica sobre la vida de estas familias en el lugar, con los antecedentes tehuelches y mapuches en la Patagonia, la conquista española y la campaña al desierto del Ejército argentino.

A este relato histórico acompañan referencias documentales, que consignan tratados entre el gobierno nacional y las distintas comunidades originarias.

Entre otras cosas describe aspectos culturales de los mapuches, creencias religiosas y datos sobre su cosmovisión, que fundamentan las razones por las cuales estas familias tienen un fuerte arraigo en el lugar.

El documento afirma que estas familias, que en la actualidad encabezan Clorinda Gualmes y Silvia Ranquehue, "pueden demostrar que al menos cinco de sus generaciones vivieron, crecieron, amaron, trabajaron y hasta murieron en Virgen de las Nieves" y que "acreditan una posesión en el lugar de al menos 105 años".

Luego contrasta esos datos con la llegada del Ejército, en diciembre de 1937, con el batallón número 6 de Zapadores Pontoneros, que establecieron allí la base para la creación de la Agrupación Militar Bariloche.

La presentación plantea cuestionamientos técnicos al proceso legal que lleva adelante el juez federal de Bariloche, Leónidas Moldes, y rescata dos intentos oficiales por resolver el problema en base a un entendimiento.

Uno de ellos data de 1940, cuando el teniente coronel Napoleón Irusta reconoció parte de la posesión de las familias mapuches, y el otro en 1995, cuando algunos diputados intentaron -sin suerte- legitimar aquel reconocimiento. (Télam).-