Lejos de despejar el escenario para el funcionamiento de Ralco, la
disposición del gobierno a entregar la tasación de las propiedades
de las cuatro familias pehuenches que aún se oponen al proyecto, complica
aún más la situación.
Esto porque, al entregar la tasación
a Endesa, la compañía eléctrica podría dejar el dinero estipulado
en el tribunal que corresponda y tomar posesión de los terrenos.
Si eso ocurriera se daría la paradoja
que Endesa dispondría de los terrenos pero no podría inundarlos y
llenar el embalse debido a la orden precautoria del Sexto Juzgado
Civil de Santiago, medida que fue adoptada tras un fallo del mismo
tribunal que declaró nulo el proceso por el cual Endesa obtuvo los
permisos ambientales para Ralco.
Ambas medidas fueron apeladas por la
compañía ante la Corte de Apelaciones de Santiago, pero de continuar
el proceso judicial, el conflicto Ralco se prolongaría por más de
un año, lo que económicamente no conviene ni a Endesa ni al gobierno,
que ya anunció que deberá tomar medidas de racionamiento, además de
un alza en las tarifas eléctricas, si la central del Alto Biobío no
está operativa a partir de junio de 2004, como está programado.
Por esta razón tanto Endesa como el
gobierno han insistido que siguen dispuestos al diálogo y a buscar
una salida negociada, misma afirmación que han hecho las familias
pehuenches a través de sus abogados que las representan.
Según explicaron fuentes vinculadas
al caso, Endesa presiona porque la tasación se haga pública, ya que
se podría convertir en una herramienta de presión hacia los pehuenches.
Esto porque la suma de dinero que deberían
recibir los indígenas, de acuerdo a la tasación, es considerablemente
menor a la oferta de Endesa que llega a los 200 millones de pesos
y 77 hectáreas para cada una de las cuatro familias.
En ese hipotético escenario, estima
Endesa, los pehuenches estarían más abiertos a aceptar su oferta,
terminar con los juicios y lograr la operación de Ralco.
Por su parte, los representantes de
los pehuenches, insistirán en las herramientas jurídicas que impiden
llenar el embalse, para que Endesa acepte una mayor indemnización
y terminar así con los juicios. |